martes

El viento en la cara

Cuando vivía en Toronto tenía una bicicleta celeste que me compré en un negocio de usado, por menos de cien dólares. Tenía el manubrio negro y la pintura un poco descascarada. Me acuerdo la tarde en que me la robaron. Estaba buscando casa donde mudarme y cuando dije que era de Argentina, el dueño del lugar me empezó a hablar de fútbol, de Maradona y yo me dejé llevar por la charla porque el tipo me caía bien. El señor era finlandés y debimos haber hablado de muchas otras cosas más. Cuando salí, mi bicicleta ya no estaba. Siempre la enganchaba con candado, pero esa vez, por creer que no iba a tardar mucho tiempo, la dejé suelta. Grité rezongando, buscándola por si la veía, mientras el finlandés miraba sin saber qué decir. En esa época Toronto tenía fama de ser la capital mundial de la bicicleta robada.
No la lloré mucho tiempo y me compré otra, también usada y casi igual a la que me habían robado. A esta le puse un canasto plástico adelante, para poder llevar las bolsas de las compras. Iba pedaleando hasta el hospital donde trabajaba, por calles con nombres como Harbord o Montrose , tranquila, sin transpirar mucho, siempre buscando algún lugar nuevo que no conociera, para mirar los árboles, las casas enormes de madera, los jardines al frente. Nunca usé casco. En primavera y verano, cuando se podía andar en bici, no quería cargarme con nada extra. Ya bastante tenía con lo que había que cargar en invierno.
Ahora con las bicisendas en Buenos Aires, fantaseo con la idea de otra vez ir a trabajar pedaleando. Iría por Perón derecho hasta Alem y de ahí hasta Retiro. Hasta usaría las bicis que le alquilás por hora al gobierno de la ciudad. En teoría se ve parecido: dos ciudades, dos caminos hechos de calles para pedalear, dos bicicletas, una misma persona recorriéndolas. 

1 comentario:

cristian dijo...

No sabia que alguna ciudad fuera conocida como la capital de las bicicletas robadas! Me gustó mucho como contaste una experiencia vivida en Toronto a través de la bici. Me gustó también como terminaste el relato..."Una misma persona recorriendolas..." A ver cuando vienes en bici al trabajo :P